¿De qué depende el presupuesto de un servicio de limpieza?

¿De qué depende el presupuesto de un servicio de limpieza?

Como una de las empresas de limpieza en Sabadell queremos ver esta nueva entrada del blog, a grandes rasgos, cómo se hace un presupuesto de limpieza. Date cuenta que, muchas veces, será la primera impresión que se lleve el cliente de una empresa de este tipo. Por eso mismo ha de estar bien cuidado y ofrecer una imagen seria y profesional. 

Para tener claro de qué modo valorar y comparar presupuestos de limpieza y saber qué empresa es la más recomendable hay que tener varias cosas en consideración:

Aparte de las tareas de limpieza que se acometen, hay que valorar otros puntos como:

  • Salario de los trabajadores. 
  • Seguridad social.
  • Vacaciones.
  • Productos de limpieza utilizados. 
  • Desplazamiento
  • Ropa específica de trabajo

Todo para calcular y hacer un presupuesto detallado de cualquiera de los servicios del catálogo de Brill 2000: limpieza de comunidades, oficinas, obra, edificios o cristales. 

Requisitos para hacer el presupuesto 

Hay que empezar por concretar entre trabajos por horas y por proyecto. Hemos de saber si se cobrarán los trabajos por hora o por proyecto. En el primer caso hay mayor flexibilidad para el cliente y para la empresa. El precio es más ajustados. Suele ser el caso de presupuestos de limpieza de comunidades o de oficinas, trabajos de mantenimiento a medio y largo plazo.

En cambio, los trabajos por proyecto permiten un margen mayor al ser trabajos puntuales. Es el caso de la limpieza de garajes o de una limpieza fin de obra.

El siguiente es será fijar el precio de la tarifa de limpieza por hora. Depende además del grado de especialización de la tarea o de si hace falta o no maquinaria industrial. Con trabajos más específicos nos referimos por ejemplo a:

  • Servicio de limpieza con ozono para desinfectar y desodorizar por ejemplo.
  • Limpieza industrial con maquinaria como barredoras, fregadoras, agua a presión o pulidoras.
  • Limpieza de cristales en altura: cuando los cristales requieren el uso de pértigas o arneses.

Para estos trabajos hay que tener en cuenta variables  como la especialización del trabajador, los extras por peligrosidad, la amortización o el eventual traslado de la maquinaria.